Pensamiento de oro, y de cómo no nos ayudan las distorsiones cognitivas

En el presente hablaré de lo que son las distorsiones cognitivas y de cómo nos afectan ahora más que nunca.

Las distorsiones cognitivas son como una especie de error en el procesamiento de la información. Estas juegan un papel muy importante y predominante en la psicopatología al producirnos perturbación emocional.

Estos pensamientos irracionales los podemos llegar a tener todos. La diferencia entre las personas que no se quedan «atrapadas» y las que sí es saber detectarlas y analizarlas para poder hacer frente de una manera más realista y positiva.

Algunas de las más habituales son:

La sobregeneralización:

es cuando pensamos que algo que ha pasado una vez pueda volver a pasar … En estos momentos sería pensar que para que alguien cercano ha muerto por coronavirus nos tenga que pasar a todos oa nosotros algo parecido.

Maximización y minimización:

actuamos así cuando maximizamos los errores propios y los éxitos de los demás y en cambio minimizamos los propios éxitos y los errores de los demás … Hoy en día al estar siempre conectados a las redes las personas pueden distornsionar pensando que los demás lo hacen todo mejor!

La personalización:

cuando las personas se sienten el 100% responsables de lo que ocurre a su alrededor … Esta es la más peligrosa ahora mismo, ya que muchas personas pueden llegar a culpabilizar de la situación actual o de no poder hacer más de lo que hacen. Buscar algo que sí podemos hacer y esté a nuestro alcance nos ayudará a ser más realistas y empoderarnos.

Abstracción selectiva o filtrado:

sólo nos fijamos en las noticias negativas, ahora mismo tenemos que ser muy cuidadosos en estos filtrado y también fijarnos en las cosas positivas que también están pasando!

Pensamiento polarizado:

Las cosas se ven en tonos de blanco o negro, del todo o del todo, siempre-nunca… es la más utilitzada..Aquí el lenguaje debe centrarse en utilizar expresiones más moderadas como; «A veces»… «de vez en cuando», «ahora», «actualmente»… en definitiva ser más concretos en las expresiones que utilizamos.

El razonamiento emocional:

que es pensar en base a cómo nos sentimos … Ahora mismo sería algo como «Me siento triste, porque todo es muy triste». Aquí podemos sentir que estamos tristes pero no pensar que todo es triste sino que a mí me está afectando de una manera determinada, tal vez compartir esta tristeza o darle un espacio para pasar a hacer otra actividad o ocuparnos con otros cuestiones nos puede ayudar.

Los debería:

Las cuales son creencias poco flexibles de cómo deberían ser las cosas, como deberían comportarse las personas. Si se centran en un mismo favorecen la autoaniquilació, y si hacen referencia a los otros fomentan la rabia, la ira, la agresividad … Nada debe ser, las cosas son de diferentes maneras y existen muchas realidades, por tanto Prova’t, sorprende -te … a veces sólo conoces una versión de ti mismo.

Inferencia arbitraria:

adivinament el futuro «todo acabará fatal» o adivinament del pensamiento «esto es porque no le caigo bien». No infiere porque esto alimenta las especulaciones y la paranoia, si tienes una duda pregunta y si de algo no tienes evidencias puede que tus suposiciones (sentidos) te estén engañando, que pasa muy a menudo.

Etiquetación:

generalmente son etiquetas que nos ponemos a nosotros mismos del tipo «no sirvo para nada» cuando cometemos un error … ni servimos para nada ni servimos para tot..fem cosas bien ya veces nos equivocamos, lo que nos hace aprender mucho.

Como vemos podemos cambiar nuestra manera de convivir con nosotros mismos y con los demás sólo teniendo a raya estos pensamientos tanto limitadores y rígidos.

Pensar de manera alternativa, más realista y específica nos ayudará a mejorarlo. Aprender a ser más conscientes de lo que pensamos y cómo pensamos nos ayuda a poder cambiar hacia un estilo más ajustado a la realidad y concreto, a no caer en generalizaciones ni dramatismos que lo que hacen es simplificar la realidad para no tener que pensar tanto. Por lo tanto no tengas pereza, piensa alternativamente, pone en duda tus pensamientos, cuestiona-te, sobre todo cuando no te favorecen ni te ayudan a ser más flexible y te crean ansiedad. Sé más justo contigo mismo y no te dejes llevar los extremos.

Pensamiento de oro, y de cómo no nos ayudan las distorsiones cognitivas

Elisabeth Rusiñol Mirapeix
Psicóloga Sanitaria Colegiada 19049
Tel. 636 367 921
eli.rusinol.psicologa@gmail.com