Volvemos a la normalidad!
En el caso de los niños es muy importante que interioricen unos hábitos saludables para hacer frente a los acontecimientos cotidianos dentro de un orden y sentido.
Los niños deben entender porque hacen las cosas, preguntan el por qué de todo y esto es una muy buena señal. En el caso de los hábitos todos ellos tienen una explicación, la cual es necesaria explicar con cariño, paciencia y constancia.
De esta manera nuestros hijos entenderán la coherencia de aquellas acciones e incluso del bienestar que les proporciona hacer las cosas en un sentido determinado.
Hay que exigir que se cumplan?
Desde la exigencia los niños no aprenden de manera efectiva. Es necesario que en casa vean que los primeros que llevamos a cabo los hábitos somos nosotros los padres. No tiene sentido que les digamos que deben lavarse cada día los dientes porque sino tendrán que ir al dentista, que hacerlo primero nosotros y explicar los allí que gracias a habernos lavado los dientes no debemos ir al dentista tan a menudo.
Recordemos que todos los aprendizajes se consolidan con el tiempo, desde la observación y el modelado.
Por lo tanto seamos buenos modelos para nuestros hijos y poco a poco vamos volviendo a la normalidad. Si lo vivimos sin exigencias y estrés todo irá poniendo en su lugar sin que nos demos cuenta.
Los hábitos y las rutinas nos acaban dando a la larga la constancia y la regularidad que requerirán las cosas que queramos conseguir en la vida de adultos.
Algunos trucos
- Convierte la hora de ir a lavar los dientes en algo que hacer juntos, lávese los dientes delante de vuestros hijos para que vean que vosotros también lo haga y de paso los enseñáis, como aquel que no quiere la cosa, como se hace . O jugar a que se lo enseñen ellos, por ejemplo !!! Siempre se hacen mucho en eso de compartir lo bien que hacen algo.
- Implicaros a su hijo en la elaboración de la cena dependiendo de la edad del mismo. Si es muy pequeño permita que os vea preparándolo desde la distancia de seguridad. Que huela la comida, el toque…
Convierte la hora del baño en un momento común, diga a su hijo que si acaba de hora de ducharse tendrá más tiempo para hacer lo que él elija (o lo más aproximado) - Busque tiempo para leer juntos, es importante que nos vean a nosotros haciéndolo primero, cuando más pequeños además sirve esta premisa!
Elisabeth Rusiñol Mirapeix
Psicóloga Sanitaria Colegiada 19049
Tel. 636 367 921
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